martes, 21 de junio de 2011

Versos al aire

Escribo versos al aire, dejo que mis palabras sean llevadas por los vientos de las fantasías, mi filosofía vuela y vuela, buscando parar en los confines del universo, donde se escribe la eternidad, donde se hallan los pilares que sostienen la realidad. Mis pensamientos buscan alcanzarlos, buscan sentirlos.

Viajo hacia las entrañas del Ser y descubro que el Ser no es más que la noche, no es más que la perpetua oscuridad: La Nada, el dios Neiz. Este dios, se devora el día, solo para volverlo a crear. Este acto de creación/devoración, esta condenado a realizarse, no se da: Es la autoafirmación de la potencialidad de esta divinidad, que a la vez es su más pura realidad: La Nada, el Vacío, la perpetua Noche. Neiz, es el Poder: Realización de su Ser.

Este nuevo descubrimiento parece que esta destinado a destruir todo el edificio de las sombras del pasado: Sus bases estaban hechas para destruirse, para que se consumará llegando este momento. ¿Cómo será "El Gran Conocimiento"?, preguntará uno horrorizado al quitarse las vendas de los ojos y descubrir la más gélida oscuridad. La ciencia toma una nueva forma: Neiz-Quin, el conocimiento de la Nada. El viejo ídolo queda desplazado y transformado.

¿Neiz-Quin? Explora los principios del Vacío: Todos los viejos templos de la Razón quedan desarticulados, aquí solo reina la Noche. Intentaron sujetarse de algo insujetable. El Ser solo es relativo: Lo predice el oráculo de lo Ilógico, de la fantasía, lo irracional: Cian, la locura. Este mensajero dictamina: "Dos Ser que se juntan dan la Nada, necesariamente, nunca existió dicha separación. Se muere al nacer "

Neiz es contradictorio, no obedece a la Diosa Razón, él es el que la crea. Neiz es un Ser que es lo que No-Es, en el sentido de los dioses, lo absoluto. Así, Neiz es eternidad, necesidad, pues la contigencia no esta inscrita en sus entrañas. El juez que dicta "Puede ser como no ser" no tiene poder sobre él: No puede dejar de ser, porque ya es No-Ser.

Esta gran revelación causa misterio y asombro. Cian es el causante. Este produce la sensación de estar frente a la Gran Verdad, lo que da sentido a lo que se percibe. Cian brota desde lo interno, brota desde el Caos primordial del hombre y se convierte en el dador de sentido. Lo racional-la causa, queda relegado por la locura, el sin-sentido y el sin-razón, solo queda un impulso ciego, que une al hombre con el mundo, demostrando la Unidad de la Nada, Neiz.





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